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domingo, 25 de diciembre de 2011

EL PAN DE ALMENDRA ARGENTINO

          Es costumbre en las fiestas navideñas hacer ricos y tradicionales platos. Los dulces ocupan un lugar importante, pero en cada país se realizan de una manera diferente, teniendo en cuenta el clima y los ingredientes que son más comunes en cada lugar.
          En España son muy comunes los mazapanes y turrones, los hay de todas las clases y sabores, pero  estaría bien conocer qué es lo que se come en otras partes del mundo. Por ejemplo en Argentina, un país que está muy lejos de aquí, pero con algunas tradiciones parecidas a las nuestras.
          En aquel lugar es muy frecuente hacer para estas fechas "pan dulce". Lo hay de muchas clases, en cada zona le dan su toque personal, y últimamente tambien se han añadido modalidades, para ligh, para celícos, diabéticos...Es decir, que el que no come pan dulce argentino es porque no quiere.
          Entre todos ellos os voy a presentar el "pan de almendra", por ser una receta fácil de hacer y que tiene que estar riquísima.¡Ahí va!

Pan de almendras

Ingredientes:

250 g de margarina
250 g de azúcar
3 huevos
sal
4 cucharadas de leche
250 g de harina
2 cucharaditas de levadura
2 manzanas verdes
2 claras
75 g de almendras
una cucharada de azúcar glas 

Preparación:
 Tener todos los ingredientes a temperatura ambiente. Mezclar la margarina con 200 g de azúcar y una pizca de sal, agregar los huevos uno por uno, luego la leche y después la harina bien mezclada con la levadura. Pelar las manzanas y retirar la pulpa, cortarla en daditos y agregarla a la masa. Poner en un molde de 25 cm y hornear a temperatura media durante 15 minutos. Mezclar las dos claras con 50 g de azúcar hasta hacer un merengue y añadirle 50 g de almendras picadas. Extender sobre la torta en horneado y esparcir por encima las almendras restantes. Hornear durante media hora más. Servir la torta a temperatura ambiente, con azúcar glas.

domingo, 18 de diciembre de 2011

LLEGA LA NOCHEBUENA



          Continuando con el tema que nos ocupará durante estos días de navidad, hoy vamos a hablar un poco sobre la nochebuena y los recuerdos que afloran en nuestra mente cuando decimos su nombre. Recuerdos del pasado, de la infancia, y por eso mismo cargados de añoranza.
          La Nochebuena, como todos sabemos es una fiesta que se celebra el día antes de Navidad para recordar el nacimientos de Jesús. Es una fiesta tradicionalmente familiar, aunque ese carácter se va perdiendo poco a poco y cada vez son más los salones de fiestas que se abren para celebrar el evento, pero yo recuerdo, cuando era niña y jovencita, que ese día, por la tarde, se cerraban ya todos bares y lugares de ocio para que todo el mundo pudiera reunirse con sus familiares en casa y cenar juntos. Padres, hermanos,abuelos tíos, sobrinos...se reunían en una casa y preparaban las viandas con mucha alegría en medio de un gran alboroto. Se sacaba la mejor mantelería, la mejor vajilla... La cena era especial, las familias hacían un esfuerzo por estirar el bolsillo y compraban lo que habitualmente no se comía, como el marisco, el cordero... La lombarda era también un plato típico, que no podía faltar. Para los postres se reservaba el mazapán, los bollitos de aceite, que estaban deliciosos, y el turrón. Aunque en cada región las costumbres gastronómicas pueden variar.




          A las doce de la noche se iba a la Misa de Gallo, y después continuaba la fiesta. Los jóvenes salían a celebrarlo con sus amigos y los mayores y niños en casa, cantando villancicos, jugando, visistando a los vecinos para felicitarles las pascuas...
          Al día siguiente, también de carácter familiar,  se hacía la  comida de Navidad, que en algunas regiones españolas se festejaba incluso más que la Nochebuena.

No teníamos mucho, nuestras manera de divertirnos era muy sencilla, pero lo pasábamos muy bien, y sobre todo, conservábamos y conocíamos el verdadero sentido de la navidad, que hoy en día, desgraciadamente, se está perdiendo

sábado, 10 de diciembre de 2011

UN AÑO MÁS, LLEGA LA NAVIDAD



          La navidad es la fiesta más importante del año y la más extendida en todo el mundo cristiano. A los niños les trae ilusión y a los mayores alegría por el reencuentro con familiares y amigos con los que intercambian afecto, cariño, y también , por qué no, obsequios. Es también un tiempo para recordar otras navidades lejanas de la infancia y algunas personas queridas que ya no están con nosotros.

          Pero la navidad tiene momentos diferentes y no en todos los lugares se celebran de la misma manera. Cada uno tienen unas costumbres propias y una forma  diferente de vivir estos días. Por eso irán apareciendo en este blog las tradiciones más comunes  de ahora y de otros tiempos, de aquí y de otros lugares lejanos.

          Empezamos por lo que tenemos más cerca, nuestra región, Castilla la Mancha

LA LLEGADA DE LA NAVIDAD

La navidad llega ahora muy pronto. Cada año un poquito antes. Últimamente a finales de octubre, ya se empieza a ver en la televisión algún anuncio que nos recuerda que se acerca, pero antes no era así. Hace 50 o 60 años la navidad comenzaba el día de la loteria. ese era el pistoletazo de salida, el 21 o 22 de diciembre y terminada el día 7 cuando pasaban los Reyes Magos y los niños tenían que incorporarse a sus clases en los colegios. después se empezó a adelantar, y pasamos a tener ambiente navideño en los primeros días de diciembre, de ahí saltamos a noviembre, y así hasta llegar casi a últimos de octubre. La verdad es que es un tiempo tan especial y alegre que todos estamos desando que llegue cuanto antes.

LOS PREPARATIVOS


          Pero aunque la navidad no empezase hasta el día de la lotería, los preparativos empezaban mucho antes. Las tiendas se llenaban de figuritas  para hacer los belenes, de espumillón y bolitas de colores. Al principio era el Belén lo que más se hacía en las casas. era una tradición de muchas décadas. Los niños y niñas íbamos al campo o los lugares sombríos de las ciudades a coger musgo y tierra. El río se hacía con papel de plata y se ponía todo muy adornado, cuidando hasta el minimo detalle. Era costumbre que los amigos se visitasen para felitarse las fiestas, y se obsequiba con unos bollitos de aceite y una copita de anís,y luego se pasaba a ver el Belén. Poco a poco esa tradición fue cambiando y se fue sustituyendo el Nacimiento por el Arbol de Navidad, aunque en muchos hogares coexistían y coexisten también hoy, los dos.
         Los bollitos de aceite y las galletas de tahona las hacían las mujeres en unos hornos especiales que había en las panaderías. En los días previos a la navidad se llenaban de madres de familia que querían tener sus dulces hechos a tiempo para la Nochebuena.

LAS FELICITACIONES


          Cuando los amigos y familiares estaban lejos y no se podían reunir se mandaban felicitaciones. Se hacía a través del correo ordinario, había que comprar un sello en los estancos y un sobre, poner la dirección postal y llevarlo al buzón,  porque en aquellos tiempos no había Internet, ni ordenadores, ni siquiera se sabía lo que era eso.

EL AGUINALDO



          Otra costumbre que ya se ha perdido o se va perdiendo, era la de dar el aguinaldo. Consistía en entregar a algunos empleados públicos de los ayuntamientos ( servicio de limpieza, mantenimiento...), a los maestros, a los empleados de las fábricas, a los que estaban  trabajando en las casas...un obsequio, que podía ser en forma de dinero, como una propina por su trabajo de todo el año, o bien algo de comer. Yo recuerdo , que cuando era muy niña, pasaban los del servicoio de limpieza con una estampita como la de arriba, y mi madre siempre les daba a cambio una pequeña propina para las fiestas.

         Además de esto los niños también salíamos a pedir el aguinaldo por las casas. Quedámos un grupo de cuatro cinco y recorríamos las casas del vecindario con la pandereta y la zambomba. Cuando nos abrían les cantábamos un villancico y luego nos daban unas moneditas. después las gastábamos en chucherías, que entonces se limitaban a unos pocos caramelos, chicles y poco más.

                           

          Seguro que estos recuerdos os han puesto un poquito nostálgicos, sobre todo a los que tenemos pasaditos los 40, y bien pasaditos. Bueno, pues en las próximas entradas os seguiré hablando de más cosas que se hacín antes por navidad